Un día para reír, sorprender y endulzar la inocencia con un poco de creatividad.

El 28 de diciembre, en Argentina y otros países hispanohablantes, se celebra el Día de los Inocentes, una tradición que mezcla historia, religiosidad y humor. Su origen se remonta a un relato bíblico: el rey Herodes, al entender que había nacido un “nuevo rey”, ordenó la matanza de los niños menores de dos años en Belén, buscando eliminar cualquier amenaza a su poder. Con el tiempo, esa conmemoración trágica se fusionó con prácticas festivas, dando lugar a bromas e “inocentadas” simpáticas en lugar de solemnidad. 

Hoy, en este día tan particular, amigos y familiares se animan a jugar pequeñas trampas: desde cambiar objetos de lugar, contar noticias disparatadas o simplemente sorprender con bromas cariñosas. La gracia está en descubrir quién cae primero… siempre con respeto y sin causar daño.

Y para hacer de este día algo más tierno que engañoso, ¿qué tal transformar las risas en momentos compartidos? Te proponemos que, una vez cumplida la inocentada, invites a quien la sufrió a una merienda. Podés tener a mano unas Galletitas Turimar Chips, que aportan ese toque crujiente, chocolatado y divertido. Que esa galletita reparta sonrisas y aliviane el “caíste por inocente.

Este Día de los Inocentes, que la creatividad, el humor amable y la dulzura sean los protagonistas.